“Los médicos son hombres que prescriben medicinas de las que saben poco, para enfermedades de las que saben menos, en seres humanos de los que no saben nada" Voltaire Pintura artista Maggie Taylor 1. Escribe mil veces: No debo correr al médico a consultar, cuanto pequeño malestar o dolencia, me aqueje. (Vive sabiendo que, estar vivo implica atravesar por altibajos naturales a lo largo de la vida, respira profundamente, trata de no conflictuarte, aliméntate con inteligencia, descansa, y deja que el cuerpo mismo sane) 2, Te ruego, repitas conmigo: No debo someterme a chequeos periódicos o preventivos, ni a exámenes invasivos y, por ende, antinaturales, que atenten contra mi integridad y armonía física y emocional (Máxime cuando me siento bien, puesto que nadie mejor que yo mismo, y no un tercero, para ratificar mi propio bienestar) 3. No permitas que te dictaminen, decreten y logren persuadirte, sugestionándote con el diagnóstico más recurrente, aberrante y perverso, de los últimos decenios, convirtiéndote en un cliente muy rentable, que agigante los listados de los “enfermos de cáncer”. 4. No participes voluntariamente en ese abominable comercio, uno de los mayores negocios auspiciado por la industria farmacéutica con la complicidad de los estados, y que lleva el rentable y publicitado nombre de “cáncer”, la llamada enfermedad, cuyo solo diagnóstico realizado en la consulta médica, puede causar hasta en el más sano, un shock nervioso y emocional (DHS), y convertirse en la causa que siempre precede, precisamente, a cualquier “enfermedad”. 5. Si recientemente te dieron el “consabido” diagnóstico, pásalo por alto, minimiza tu angustia, no te sugestiones, tranquilízate, piensa que tu médico no es un dios, la medicina que práctica No es una ciencia, No es exacta, NO TIENE UNA SOLA LEY, así que dista de los fundamentos de cualquier ciencia: es decir, sus teorías, diagnósticos, prescripciones y posologías, no son verdades absolutas, que estén basadas en observaciones experimentales 100% fiables, repetibles y verificables, y sí en cambio, sus dictámenes obedecen a una gélida “normalidad estadística”, que les provee de reglas y fórmulas que aplican sin decoro, al hacer sus diagnósticos. (El cáncer se diagnostica, o se sentencia con un 51% de posibilidades de que se padezca, arrojando por la borda el otro porcentaje negativo, inestimable, del 49%) 6. Recuerda este nombre, RYKE GEERD HAMER, el médico alemán que desde 1981, descubrió, luego de padecer la “enfermedad”, que, el cáncer, no es sino un PROCESO BIOLÓGICO NATURAL, (para escapar de una amenaza mortal), que el organismo pone en marcha como respuesta a un shock conflictivo (DHS) altamente agudo y dramático (1), inesperado (2), que se vive en soledad (3); y que afecta, casi simultáneamente los tres niveles, la psique, el cerebro y el órgano y; según la naturaleza del conflicto, sea afectivo, laboral, sexual, etc., impacta en una u otra área del cerebro, produciendo una especie de corto circuito que Hamer denomina «foco», y que adopta la forma de pequeños anillos concéntricos en cierta zona del cerebro que preside el funcionamiento de uno u otro órgano. 7. Debes entender de otro lado, que, eso que los médicos alópatas, llaman Metástasis, es la ficción más intrincada de su práctica profesional, una especie de “espiritismo o metempsicosis de las células malignas” mediante, el cual, según su teoría, logran fluir por el torrente sanguíneo o linfático, y pasar de ser, por ejemplo, células pulmonares malignas a convertirse, mágicamente, en células malignas del hígado, o del páncreas, o de cualquier otro órgano que supuestamente invaden. La Metástasis no existe, no hay tal insólito desplazamiento, no existen células malignas y; esto tiene una explicación científica, 100% comprobada y verificada por el doctor Rike Geerd Hamer, quien entendió que tal efecto de nuevos órganos afectados, tenía que ver con nuevos conflictos o procesos biológicos activados, que se sumaban como consecuencia de las drásticas implicaciones del primero: A la muerte de un hijo, se suma, quizá, el abandono de la pareja, y a éste la pérdida del trabajo, el dictamen de una enfermedad, etc. 8. No lo olvides: Cada vez que atravesamos una situación emocional muy fuerte y profunda, e intempestiva y la vivimos íngrimos, en soledad, el cuerpo humano entra en un programa consuetudinario, que ha realizado durante milenios, un programa de supervivencia de la especie, en procura de restablecer la armonía del cuerpo; se trata aquí de activar un PROCESO BIOLÓGICO NATURAL, el cual colapsamos cuando lo intervenimos con agentes extraños y nocivos como los antibióticos, medicamentos. o los más obtusos y bestiales métodos de radiación y quimioterapia. ¡Cuántas veces habremos padecido “enfermedades” o PROCESOS BIOLÓGICOS NATURALES, sin enterarnos siquiera, pues al omitir la consulta, resguardamos la integridad de nuestros cuerpos! 9. Se trata ahora de que ayudes a preservar tu vida, hay mucho por reaprender y conocer sobre nuestra más atesorada provincia, de la cual sabemos tan poco: el cuerpo humano. El doctor Hamer, aporta a la ciencia una nueva manera de entender el diagnóstico de lo que llamamos enfermedad que, en la Nueva Medicina Germánica, es en realidad la segunda fase, la de curación; SÍ, el conflicto emocional está en solución y; paradójicamente, justo entonces acudimos al médico, y su prescripción de medicamentos y tratamientos invasivos alteran todo el PROCESO BIOLÓGICO NATURAL, que ya estaba en marcha. Es hora de que sepamos, cuán lejos estábamos de la comprensión total de la llamada “enfermedad”. Una hepatitis, por ejemplo, una neumonía, la gripe, la tuberculosis, la diarrea, son síntomas de que el proceso de curación se encuentra en curso, ya ha transcurrido la fase activa, la que sobreviene al shock emocional y cuyos síntomas pasan inadvertidos para nosotros. Es hora de entender de una vez por todas, que la infección, esto es, ¡La proliferación de hongos, bacterias o virus, se produce en la fase de curación de las enfermedades, ya que los virus, las bacterias y los hongos, son los aliados indispensables para nuestra supervivencia, ellos descomponen “tumores” o reconstruyen la pérdida celular (necrosis) de los tejidos! 10. El doctor Hamer nos ayuda a deducir todo como nunca lo habíamos concebido, nos dice que los microbios, las microbacterias, y lo que llamaron tumores malignos, hacen parte de dicho proceso natural de curación, y en contraposición con la medicina alopática, que ataca a muerte sin entender el sentido natural y hasta económico con que el mismo cuerpo crea los mal llamados “tumores malignos”, que nada tienen que ver con la metástasis, y sí con una hiperfunción celular necesaria en ese momento de crisis y de shock conflictivo, cuando el cuerpo corriendo peligro de muerte, se pone al límite, reaccionando de emergencia, bien sea a través de esta proliferación celular, en el caso por ejemplo de los alvéolos pulmonares multiplicándose para aumentar la capacidad respiratoria de quien huye del peligro, o en virtud de una hipofunción, una necrosis celular, que le permite al órgano responder puntualmente al PROCESO BIOLÓGICO NATURAL en activación, y cuya eliminación, en el primer caso, o regeneración, en el segundo, está programada, por medio de agentes naturales, como las microbacterias que, podrían descomponer el excedente de células o recomponer la sustracción de tejidos; claro, siempre que dichos microbios existan, y no hayan sido fulminados con medicamentos; alterando todo el mecanismo natural y; llevando a encapsular el “tumor”, sin que, por ello, incluso, se amenace el cuerpo de manera directa, aunque el médico, ya sabemos. dictaminará lo contrario y prescribirá lo consabido: Quimioterapias y radiación. 11. No pongas en manos de la farmacéutica tu salud y tu vida. Está en tus manos reaprender de manera autodidacta, como conviene, sin prejuicios ni supersticiones académicas y pseudocientíficas, con clara vocación sociópata y; poner de esta manera en evidencia la gran mentira del cáncer, la infamia del sistema de salud y la abyección de la farmacéutica, para así, replantearnos sus métodos y sus estrategias: Los exámenes invasivos, la tramitología, las ruletas rusas y las pandemias, el aluminio y el mercurio de las vacunas obligatorias, los antibióticos que aniquilan las microbacterias, los miedos infundados y las terroristas campañas pro exámenes preventivos; el cinismo en la propalación del diagnóstico del VIH y el Ébola, los efectos secundarios y los medicamentos, el ensayo y error, las radiaciones y las batallas campales contra uno mismo, las infames EPS y las clínicas de la muerte, los Haarald Zur Hausen que ganan premios Nobel con falacias y papilomas virus (que, sin comprobación científica, -ya sabemos los mortales estragos en nuestras infantes y adolescentes-, hacen ganar a la farmacéutica astronómicas cifras con vacunas contra el fantasmal “cáncer uterino”). Es tiempo de no pasar por alto sus negligencias, las letales quimioterapias, la prepotencia en la consulta, los diagnósticos errados, los erráticos procedimientos, los virus que no se hibridan en la naturaleza, pero que sí se les hibrida en el laboratorio: (la H5N1 híbrido de ave y de hombre, la H1N1, híbrido de ave, humano y cerdo); y las otras, las enfermedades nominales, que solo son una etiqueta y un nombre en un prestigioso manual que es un perverso catálogo de tienda, de sumas y restas y; hay más en ese plan eugenésico que entrama todo este despliegue sistemático y siniestro, pero aquí me detengo, por que más razones me obligan a seguir estudiando las únicas leyes de la medicina, que, son el más noble legado a la humanidad, que hayamos conocido; leyes investigadas, verificadas y enunciadas por el doctor Rike Geerd Hamer, quien fue y sigue siendo después de su muerte, vilmente perseguido, desprestigiado y puesto en entredicho, por la industria farmacéutica y el sistema de salud imperante y hoy calamitosamente, mercantilizado. Hablo de “Las Cinco Leyes Biológicas”, por supuesto, leyes que no quieren que conozcas. Ana María Rivera Este texto incipiente, me ha sido impuesto escribirlo, porque cuando la inteligencia resuena con un tema, se debe compartir con la urgencia de saber que alguien en algún lugar, lo está necesitando, sin saberlo. [Perdonen la omisión temporal del mismo, amigas queridas, ya ausentes, Marta Lucía y Gabriela Bárbara] Videos sobre el doctor Rike Geerd Hamer https://www.youtube.com/watch?v=tXcFAR_yLmc&feature=youtu.be https://www.youtube.com/watch?v=5CaymNwksN4&feature=youtu.be

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